Si estás invirtiendo actualmente, es muy probable que te hayas levantado con una sensación de pérdida total. Pensando que esto se veía venir y que deberías haberte salido antes.
Mi cartera perdió mucha pasta el viernes.
Entiendo que la tuya también.
A menos que seas un trader muy bueno, de esos que van contra el mercado… y se hacen ricos. JEJEJEJE.
¿Qué pasará el lunes?
¿Será un lunes negro?
Otra jornada de caída podría disparar el VIX (el famoso “índice del miedo”) a niveles de auténtico pánico. Por eso, me estoy preparando. Y te cuento cómo.
Hoy sábado me voy a esquiar. Y mañana, ruta Off Road con la moto. Si Donald Trump, una de las personas más ricas del mundo, se va a jugar al golf mientras se desploman los mercados… ¿qué narices hago yo mirando índices, asientos contables y gráficas?
Como cuento en mis capítulos, recuerdo bien cuando en 2020 mi cartera llegó a estar en -67%. Todo mi patrimonio. Todas mis inversiones. Mi interés compuesto al garete. -67%.
Posiblemente siguió bajando… pero no era capaz ni de mirar el ordenador. Mi hijo tenía un añito, y yo estaba ocupado con otras cosas.
Y te aseguro que no tenía miedo. Quien me conoce y me vio en ese momento, más que asustado, me vio con ojos de codicia. Ese año cerré en +320%. Una barbaridad. Mi gestor estaba más preocupado por el sablazo fiscal que yo por las caídas.
Bendito problema.
Ese año la bolsa me dio una riqueza increíble. Potenció todo mi patrimonio. Y fue entonces, con un viejo micro de cuando escribía música, que pensé: esto tengo que contarlo. Nació Salvados por la Bolsa.
Si no entiendes que lo que está pasando ahora es una gran oportunidad, es que no sabes de qué va este juego.
Si no comprendes que los máximos de tu cartera volverán, y lo harán más pronto y más rápido de lo que crees… quizá deberías dejar las cartas y no jugar.
Si este escenario de caídas en 2025 te agobia, y sin embargo las subidas intensas de 2024 te alegraban… hasta que no cambies esa perspectiva, mejor aléjate del mercado más rentable y seguro del mundo.
Y una pregunta para pensar: el caso de Nvidia. Hace unos meses cotizaba a 150 $. Hoy está cerca de los 90 $. ¿Qué ha cambiado en la empresa? ¿Es la misma empresa, pero más barata?
No son recomendaciones ni de compra ni de venta. Solo preguntas. Preguntas interesantes que, si puedes, intenta responderte tú mismo.
Si no sabes leer e interpretar unos asientos contables puedo explicartelo aquí.
El lenguaje de la contabilidad, aquí es el secreto del éxito
«Nada cambia si nada cambias»
