Select Your Favourite
Category And Start Learning.

Oro parece, plata no es

Recuerdo a los Canis de mi barrio a principios de los 2000. Se compraban cadenas de oro, se dejaban un mechón largo y se hacían crestas.

 

A veces teñían todo el pelo de rubio, otras solo el mechón.

 

Llevaban zapatillas Osiris con lenguas anchas.

 

Mascaban chicle.

 

Escuchaban música bakalao.

 

Yo siempre fui de la cultura del rap. En mi Walkman sonaban Sólo los SóloHablando en PlataPublic EnemyDoble V y Tote.

 

Los Canis iban por un lado, y yo por otro. Nos respetábamos. Pero había algo que sí me gustaba de ellos: esas cadenas de oro colgando de sus cuellos esqueléticos, sentados en la Piaggio Zip de agua, la Jog RR o la Yamaha Aerox.

 

Se gastaban 80 euros en esas cadenas…

 

Demasiado caras para mí.

 

Demasiado bonitas para un Cani.

 

Esas cadenas hoy valen cerca de 1.000 euros.

 

Las mismas cadenas.

 

Sin saberlo, estaban multiplicando por diez su único patrimonio, junto con sus motos. Su primer x10, y quizás el único.

 

La moto hoy yace desmontada, con el motor gripado en su garage.

 

El oro es algo que siempre he respetado, algo que siempre sube, lo que más años lleva subiendo y superando la inflación año tras año. 

 

Hoy traigo a un experto en oro, José Manuel Marín a.k.a El Robin Hood de las finanzas.

 

Espero que te guste el capítulo, y recordarte que el curso de Febrero será el último que se vuelva a impartir, así que si estás interesado, entra y reserva.

 

«No es oro todo lo que reluce»

 

Robbin